Un Vietnam con corazones unidos, superando persistentemente las dificultades, renovando el pensamiento para esforzarse constantemente y con fuerza en el camino del desarrollo. |
La guerra terminó, el país se reunificó. Pero la unificación no es sólo una cuestión de continuidad geográfica, sino también de continuidad humana: una aspiración profunda de millones de corazones vietnamitas hacia un futuro común, sin odio ni separación.
Al resurgir de las cenizas de la guerra, el país enfrentó numerosas dificultades: la infraestructura estaba severamente dañada, la economía estaba agotada y la vida de las personas era extremadamente difícil. Pero a pesar de las dificultades, Vietnam ha elegido resueltamente el camino: la armonía, la solidaridad, la autosuficiencia y la aspiración de superarse.
En el inspirador artículo "Vietnam es uno, el pueblo vietnamita es uno", el Secretario General To Lam afirmó: "No podemos permitir que el país se quede atrás. No podemos permitir que la nación pierda oportunidades. No podemos permitir que los ciclos de la historia se repitan. Por lo tanto, debemos anteponer los intereses de la nación y del pueblo a todo lo demás. Debemos actuar con miras al futuro a largo plazo, no por logros a corto plazo".
Este profundo recordatorio resume el espíritu del viaje de 50 años: un Vietnam que une a la gente, persevera en la superación de las dificultades e innova en el pensamiento para esforzarse constantemente y con fuerza en el camino del desarrollo.
50 años de paz y unificación: logros destacados
Vietnam, que era un país pobre, ha pasado gradualmente a convertirse en una de las economías de más rápido crecimiento del mundo. El tamaño del PIB ha aumentado de menos de 2 mil millones de dólares a mediados de la década de 1980 a casi 500 mil millones de dólares en la actualidad, colocando a Vietnam en el grupo de las 40 economías más grandes del mundo.
La tasa de pobreza ha caído de más del 70% a menos del 3%. En particular, decenas de millones de personas se han unido a la clase media, una importante fuerza impulsora del consumo, la innovación y el movimiento positivo en la sociedad vietnamita. Los sistemas de educación y salud se amplían en todo el país. La infraestructura de transporte y la infraestructura digital se modernizan constantemente, conectando a Vietnam con el mundo.
Vietnam ha optado por cerrar el pasado, resolver el odio y unir a todas las clases sociales para avanzar hacia un futuro brillante. |
Junto con el desarrollo económico, la política de reconciliación nacional se ha convertido en una base sólida para el éxito. Vietnam ha optado por cerrar el pasado, resolver el odio y unir a todas las clases sociales para avanzar hacia un futuro brillante.
Ese espíritu de armonía refleja las raíces profundas de la nación. Desde los albores de la historia, el pueblo vietnamita se ha considerado "compatriotas": personas del mismo saco de cien huevos de la madre Au Co, según la leyenda "hijos del Dragón, nietos del Hada". La palabra "compatriota" no significa simplemente "compartir el mismo país", sino también "compartir el mismo linaje", "compartir el mismo origen": ese sentimiento trasciende todas las diferencias regionales, prejuicios y circunstancias históricas.
Por eso, después de la guerra, se fomentó fuertemente el deseo de unificación nacional. El Primer Ministro Pham Minh Chinh enfatizó: "Debemos seguir promoviendo la fuerza de la solidaridad nacional, considerando la solidaridad como fortaleza, tomando la paz y la estabilidad como base para un desarrollo rápido y sostenible". Ese espíritu ha creado un éxito milagroso: la paz no sólo se conserva en el territorio, sino que también se establece en los corazones de la gente, convirtiéndose en una fuente endógena de fortaleza para ayudar a Vietnam a avanzar de manera constante.
Después de medio siglo de paz, Vietnam también ha logrado avances destacados en materia de desarrollo sostenible y seguridad social. La tasa de cobertura universal del seguro de salud alcanzó casi el 92%. El Índice de Desarrollo Humano (IDH) ha mejorado continuamente, colocando a Vietnam en el grupo de países con alto desarrollo humano promedio. Las Naciones Unidas clasificaron a Vietnam en el Índice de Felicidad de 2025 subiendo ocho puestos, ubicándose en el puesto 46, solo superado por Singapur en el Sudeste Asiático. Cada vez está tomando más forma una sociedad estable, segura y desarrollada de manera inclusiva, lo que refuerza la firme creencia en un futuro brillante.
Un Vietnam dinámico, integrado y con posición y prestigio en el ámbito internacional
Vietnam es hoy un país amante de la paz, profundamente integrado, dinámico y con creciente prestigio y posición en el ámbito internacional.
De ser un receptor de ayuda, Vietnam se ha convertido en un miembro proactivo y activo de organizaciones globales como la ASEAN, las Naciones Unidas, la OMC, el CPTPP, el RCEP... Al establecer asociaciones estratégicas y asociaciones integrales con muchos países importantes, Vietnam es un eslabón importante en la cadena de suministro global, un destino atractivo para la inversión, la innovación y el turismo.
Vietnam ha asumido repetidamente importantes responsabilidades internacionales, desde su papel como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas hasta la presidencia exitosa de cumbres internacionales. Vietnam también participa activamente en la fuerza de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas en Sudán del Sur y la República Centroafricana, desplegando hospitales de campaña de nivel 2 en puntos críticos, afirmando la imagen de un país amante de la paz y responsable ante la comunidad internacional.
No sólo eso, en grandes desastres naturales alrededor del mundo, Vietnam ha unido rápidamente sus fuerzas para brindar socorro y apoyo a los países afectados por terremotos e inundaciones, como Turquía, Myanmar... Esos actos de bondad han difundido ampliamente la imagen de un Vietnam humano, responsable y dispuesto a compartir por el bien común de la humanidad.
En particular para los antiguos países enemigos, Vietnam también se ha convertido en un modelo en las relaciones internacionales de dejar atrás el pasado, superar las diferencias, promover las similitudes y mirar hacia el futuro para convertir a los enemigos en amigos.
En un mundo volátil, Vietnam mantiene su postura en política exterior: firme en sus objetivos de independencia, autosuficiencia, multilateralización, diversificación, paz, estabilidad y desarrollo sostenible.
Innovación en el pensamiento institucional: la base para un desarrollo innovador y sostenible
El logro más profundo y decisivo para el futuro de Vietnam es la fuerte innovación en el pensamiento institucional de los últimos tiempos.
Vietnam ha identificado claramente los "cuellos de botella" que obstaculizan el desarrollo: en primer lugar, las barreras en el sistema institucional, en el aparato organizativo y en el pensamiento de gobernanza del país. Desde entonces, el Partido y el Estado han propuesto políticas importantes y revolucionarias:
1. Eliminar los cuellos de botella institucionales: Se han emitido una serie de nuevas resoluciones y reglamentos para modificar y perfeccionar el sistema legal, garantizar la coherencia, la transparencia y promover el fuerte desarrollo de los recursos sociales.
2. La revolución de la racionalización de los aparatos: el espíritu de racionalizar los aparatos, haciéndolos eficientes y prácticos se ha convertido en la tendencia dominante, extendiéndose desde el nivel central a los locales.
3. Desarrollar la ciencia, la tecnología, la innovación y la transformación digital: Vietnam considera que esto es una nueva fuerza impulsora para un crecimiento rápido y sostenible en la era digital.
4. Promoción del desarrollo económico privado: Se afirma claramente la idea de que la economía privada es el motor más importante de la economía nacional, abriendo un amplio espacio para la creatividad y el enriquecimiento legítimo.
5. Integración internacional en el nuevo contexto: Implementada con nuevas ideas, como pasar de recibir a contribuir, de una integración profunda a una integración plena, de la posición de un país detrás de escena al estatus de un país en ascenso, pionero en nuevos campos, poniéndose al día, progresando juntos y superando.
Estas innovaciones no son sólo ajustes técnicos, sino una transformación en la visión, el liderazgo, la gestión y los métodos de desarrollo: una revolución en el pensamiento con un fuerte poder de penetración. Los logros en la innovación del pensamiento institucional están sentando una base sólida para que Vietnam no sólo crezca rápidamente en el corto plazo, sino que también se desarrolle de manera sostenible, inclusiva, integral, autosuficiente y poderosa en el futuro.
Vietnam entra con confianza en una nueva era
Al celebrar hoy el 50º aniversario de la reunificación nacional, estamos aún más orgullosos y agradecidos a las generaciones que se han dedicado y sacrificado por la paz, la independencia y la unificación. Al mismo tiempo, somos más conscientes de que: la independencia, la libertad, la paz, la estabilidad, la unidad nacional, la prosperidad y la felicidad del pueblo son los valores más sagrados, la fuente de fortaleza más sostenible para todo camino de desarrollo.
Vietnam ha resurgido de las cenizas de la guerra. Vietnam ha surgido como un símbolo de paz, desarrollo inclusivo y espíritu de superar todas las dificultades para seguir adelante.
Y hoy Vietnam, con fuertes aspiraciones, con un espíritu de innovación y creatividad, con integración proactiva, inteligencia y coraje, está entrando con confianza en una nueva era: la era de una nación unificada y autosuficiente que se eleva junto con el mundo.
Fuente: https://baochinhphu.vn/hoa-binh-va-thinh-vuong-sau-50-nam-dat-nuoc-thong-nhat-102250427224643176.htm
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