Al igual que Estados Unidos, China se ha fijado el objetivo de lograr la neutralidad de carbono en su economía para 2050. Los acontecimientos recientes en el sector energético chino muestran que el país está avanzando sistemáticamente hacia ese objetivo.
Según el Global Energy Review 2023, la proporción de fuentes de energía renovables (FER) en el suministro eléctrico de China ha alcanzado el 49,9%, lo que equivale a unos 1,4 teravatios (TW). De éstas, la energía solar representa la mayor proporción, seguida de las centrales hidroeléctricas y las turbinas eólicas.
Solo en 2023, China puso en funcionamiento 190 GW de capacidad de energía renovable, un 91% más que en el mismo período de 2022.
Estos resultados confirman que China es ahora uno de los líderes mundiales en el campo de las energías renovables.
La ventaja de China en este campo proviene de su posesión de instalaciones manufactureras integradas y abundantes materias primas, así como del apoyo del gobierno chino a los programas de desarrollo de energía renovable del país.
Cabe destacar que en 2023, China representó casi el 40% de la inversión total en la construcción de centrales de almacenamiento de energía a nivel mundial, lo que equivale a un valor de aproximadamente 8 mil millones de dólares.
(según OL)
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