La declaración conjunta tras tres días de trabajo afirmó que la IA está “penetrando cada vez más en la cadena de valor de los sectores culturales y creativos, afectando las condiciones de trabajo y los medios de vida de los profesionales culturales, así como la sostenibilidad de un ecosistema cultural vibrante y rico”.

A la luz de esto, los ministros de cultura del G7 acordaron trabajar juntos para abordar las cuestiones éticas, legales, económicas y sociales que plantea la tecnología de IA y las herramientas basadas en IA para las industrias creativas y culturales.

Además, estos funcionarios también pidieron identificar y autenticar el contenido cultural que los sistemas de IA han creado, cambiado o modificado, total o parcialmente.

Centrarse en abordar los desafíos relacionados con la IA es uno de los principales temas de la agenda durante el año de Italia como presidente del G7.