Ni Ucrania ni Rusia tienen los recursos militares suficientes para lanzar grandes ataques entre sí, afirmó la agencia de inteligencia del Pentágono en sus últimas evaluaciones.

Las evaluaciones de la Agencia de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos (DIA) concluyeron que Ucrania aún no tiene suficiente munición para igualar la capacidad de Rusia de disparar unos 10.000 proyectiles de artillería al día, incluso después de que el Congreso de Estados Unidos “desbloqueara” un nuevo flujo de ayuda militar a Kiev en abril. Las fuerzas ucranianas siguen siendo capaces de realizar operaciones defensivas, pero no podrán montar una contraofensiva a gran escala durante al menos seis meses.

Rusia, por otro lado, ha adoptado una estrategia de agotamiento de Ucrania y podrá mantener la “zona de amortiguación” que su ejército ha establecido, pero sin la fuerza “para amenazar con avanzar más profundamente en territorio controlado por Ucrania, como la ciudad de Járkov”, dijo la DIA en una nota.

Las conclusiones de la inteligencia de defensa estadounidense fueron incluidas en el último informe trimestral sobre la ayuda de Washington a Kiev emitido por el inspector general del Pentágono, Robert Storch, el 15 de agosto.

Las conclusiones se hacen eco de las declaraciones públicas de altos funcionarios estadounidenses, incluido el general Mark Milley, ex jefe del Estado Mayor Conjunto, de que el conflicto entre Rusia y Ucrania está llegando a un punto muerto.

El informe del inspector general de Storch cubre el período de tres meses que finalizó el 30 de junio, después de que el Congreso de Estados Unidos aprobara el último paquete de ayuda de 61 mil millones de dólares para Ucrania. Desde entonces, Ucrania lanzó un ataque sorpresa sobre la región rusa de Kursk y recibió sus primeros cazas F-16 suministrados por sus aliados.

El informe destaca el uso exitoso por parte de Ucrania del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) suministrado por Estados Unidos para atacar áreas de almacenamiento de municiones rusas y helicópteros estacionados en dos lugares dentro de Ucrania.

El 18 de mayo, un ataque con misiles ATACMS ucranianos sobre Sebastopol hundió una corbeta. Ucrania también utilizó el arma para atacar los sistemas de defensa aérea rusos en Crimea, destruyendo algunos de los sistemas de misiles S-400 más avanzados, señaló el informe.

Los ataques ATACMS obligaron a las fuerzas rusas a reforzar las defensas aéreas de Crimea con su sistema más avanzado, el S-500, para proteger el puente del estrecho de Kerch, por ejemplo, según la DIA.

“El sistema S-500 aún no ha sido demostrado en pleno funcionamiento en Ucrania, lo que la DIA considera una señal de que Rusia está teniendo dificultades para proporcionar capacidades de defensa aérea adecuadas a Crimea”, según el informe de inteligencia estadounidense.

Minh Duc (según Bloomberg)