Desde principios de este mes, más de 600 personas sin documentos de viaje válidos han entrado a Finlandia a través de Rusia, lo que ha obligado a Helsinki a cerrar varios pasos fronterizos. “El gobierno ha decidido hoy cerrar más pasos fronterizos”, dijo Orpo en una conferencia de prensa.

Según las autoridades de inmigración, los solicitantes de asilo proceden de diversos países, entre ellos Yemen, Afganistán, Kenia, Marruecos, Pakistán, Somalia y Siria. Un portavoz de la agencia fronteriza de la Unión Europea, Frontex, dijo que la agencia planea enviar oficiales y equipo a Finlandia la próxima semana en respuesta a una solicitud de Helsinki.

Horas antes, Estonia informó que 75 migrantes, principalmente de Somalia y Siria, habían intentado ingresar desde Rusia desde la semana pasada. El estado báltico dijo que estaba preparado para cerrar los cruces fronterizos si aumentaba la presión migratoria procedente de Rusia.

La guardia fronteriza finlandesa dijo el miércoles que la entrada ilegal continuaba en los cruces fronterizos con Rusia y se había desplazado más al norte a lo largo de la frontera hacia Vartius y Salla, dos puestos fronterizos que todavía aceptan solicitudes de asilo.

El presidente finlandés, Sauli Niinisto, dijo el lunes que repatriar a personas que no cumplen los criterios de asilo se ha vuelto imposible y pidió una solución a nivel de la UE para evitar la entrada sin control al espacio Schengen.

El Kremlin dijo el lunes que había enviado una nota de protesta formal a Finlandia por el cierre parcial de la frontera entre los dos países.

Hoang Nam (según Reuters)