En 1403, Zhu Di, el tercer emperador de la dinastía Ming, trasladó la capital de Nanjing a Pekín y comenzó la construcción de la Ciudad Prohibida en julio de 1406. La Ciudad Prohibida cubre unos 720.000 metros cuadrados y es uno de los complejos palaciegos más grandes del mundo con más de 980 edificios.

Después de la caída de la dinastía Ming, la dinastía manchú Qing comenzó a establecer su capital en Pekín a partir de 1644. Sin embargo, a los emperadores Qing no les gustaba quedarse dentro de la Ciudad Prohibida, sino que a menudo iban a los jardines, estructuras de jardines con pabellones y torres, fuera de la Ciudad Prohibida.

Emperadores a quienes no les gustaba vivir en la Ciudad Prohibida

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