Como se explicó, la razón principal por la que las aplicaciones de iPhone parecen tener una ventaja sobre sus contrapartes de Android es porque hay menos opciones en el mercado. La gente puede ver muchos teléfonos Android con diferentes capacidades, procesadores, pantallas, cámaras… Sin embargo, Apple solo produce unos pocos modelos de iPhone para elegir.

Si bien Apple ha ampliado el número de modelos, todos son dispositivos de gama alta que podrán aprovechar las aplicaciones más exigentes durante los próximos años. Vonau admite que las aplicaciones de Google también son mejores en el iPhone.

Google Maps crea sus rutas sobre la marcha, lo que da a los usuarios una sensación de movimiento. WhatsApp ofrece transiciones consistentes cuando los usuarios abren el teclado o deslizan el dedo para retroceder en todas las conversaciones. Y YouTube ofrece animaciones ricas y persistentes cuando los usuarios ponen el teléfono en modo horizontal, escribe Vonau.

Otro punto que señala Vonau es que la navegación por gestos de iOS ha sido la predeterminada desde el iPhone X, mientras que los teléfonos Android ofrecen métodos diferentes. Por ejemplo, dependiendo del teléfono, se puede volver atrás usando el botón Atrás, un gesto de retroceso o una personalización del fabricante del dispositivo.

Aunque Vonau no lo menciona, los propietarios de iPhone tienen más probabilidades de pagar por una aplicación o una suscripción dentro de la aplicación que los propietarios de Android. Statista tiene un gráfico que muestra cuánto gastan las personas en App Store y Google Play Store, y cuánto pagarán en el futuro; la diferencia es enorme.

El resultado es que los desarrolladores crean mejores aplicaciones para los usuarios de iPhone porque obtendrán más ingresos, incluso si la base de usuarios de Android es mayor.