Según un anuncio del 27 de marzo, el número de empleados del HHS se reducirá de 82.000 a 62.000 después de incluir los permisos voluntarios anteriores.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) perderá 3.500 empleados, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recortarán 2.400 y los Institutos Nacionales de Salud (NIH) reducirán su personal en 1.200. Además, el mes pasado también se rescindieron los contratos de unos 5.200 empleados en período de prueba.

El plan es parte de un esfuerzo para agilizar la burocracia, supervisado por el Secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr., y con el apoyo del presidente Donald Trump y el multimillonario Elon Musk.

El Sr. Robert F. Kennedy Jr. afirmó que la medida ayudaría al HHS a operar de manera más eficiente, reducir el desperdicio de presupuesto y centrarse en prioridades de salud importantes, como el tratamiento de enfermedades crónicas.

"No solo estamos reduciendo la proliferación de la burocracia. Estamos reajustando la organización hacia nuestra misión principal y nuevas prioridades para revertir la epidemia de enfermedades crónicas", enfatizó Kennedy.

Una parte clave del plan de reestructuración es la consolidación de 28 unidades del HHS en 15 nuevas unidades, destacada por la creación de la Administración para una América Saludable (AHA). La AHA centralizará sus oficinas de adicciones, salud mental, toxicología y seguridad ocupacional en una sola agencia. Además, se reducirán 10 oficinas regionales a cinco.

Además, el NIH ha cancelado casi 400 subvenciones de investigación, incluidos muchos proyectos relacionados con la diversidad, la equidad, la investigación de COVID-19 y la enfermedad de Alzheimer. Un informe de la revista Nature revela que alrededor de 850 millones de dólares en fondos para la investigación de la COVID-19 podrían congelarse, lo que interrumpiría investigaciones vitales.

La administración Trump y Musk han defendido el plan, argumentando que la racionalización es necesaria para mejorar la eficiencia operativa y reducir la carga sobre los contribuyentes. La Casa Blanca también ha pedido a las agencias federales que se preparen para una segunda ola de despidos masivos.

Los cambios han enfrentado una fuerte oposición por parte de los funcionarios de salud y los legisladores demócratas. La senadora Patty Murray advirtió que los recortes de personal podrían afectar gravemente la capacidad de Estados Unidos para responder a los brotes, especialmente mientras un brote de sarampión ataca a Texas.

Hoai Phuong (según WP, CNN, Reuters)

Fuente: https://www.congluan.vn/my-tai-cau-truc-bo-y-te-10000-viec-lam-bi-cat-giam-post340422.html